En esta ocasión os traigo un pequeño resumen de lo que fue sin duda una preciosa boda llena de momentos maravillosos. María Esther contactó conmigo poco después de ver las fotos de su cuñada María (por cierto, es un encanto), que celebramos el año anterior.
Cuando me dijo que la ceremonia sería en la catedral de Almería fue estupendo porque yo soy un enamorado de esta ciudad y sus playas. Posteriormente haríamos una pequeña parada en la Era, con unas vistas increíbles del Monsul.
Espero que disfrutéis de estas fotografías como yo disparándolas.